viernes, 15 de abril de 2011

Esto también es ser un buen perrito...

A sus pies Señora:

La verdad es que me excita muchoe scribir este posible post mientras Usted esté a punto de lelgar a su cita con la pedicura...y dentro de poco tenga yo la foto en mi móvil de sus pies tan ansiados y anhelados, jejeje.


A veces los sumisos confunden o confundimos que nuestra meta es servir a la Señora, y no que el obejtivo sea obtener nuestro placer a través de servir a la Señora. Son dos cosas muy diferentes. Es evidente que el poder tener contacto físico con la Señora es mucho más agradable, intenso, etc... pero el fin principal de un buen sumiso, es el de servir y satisfacer a la Señora en cuantas cosas pueda precisar.

Este hecho verídico que les voy a relatar ahora, me sucedió hace unos meses y la verdad es que cuando llgué a casa, reflexioné y me sentí muy muy orgulloso por haber podido servir a la Señora y satisfacerla y ayudarla.

Siempre suplicaba a la Señora que después de mi primera sesión, podía contar conmigo para lo que quisiera y podía llamarme y que la serviría con mucho gusto. Mi idea era poder volver a repetir sesión y he de reconocer que muchas veces me convertía en un poquito pesado solicitando ese premio. La Señora me decía que si me volvía a necesitar me reclamaría, pero que de momento no precisaba de mis servicios. Yo le decía que estaba a su disposición para cualquier servicio.

Un día se conectó al messenguer y se alegró muchod e verme por que me quería pedir un favor. Mi corazón se aceleró, mi corazón se estremeció y yo le dije que estaba a su entera disposición. Me preguntó que tiempo libre tenía al mediodía para comer. Le respondí que 2 horas. Ella dijo que perfecto, que me volvería a decir.

La verdad es que me quedé un poco pensativo, elocubrando todas las posibilidades, pero bueno.....estaba emocionado por si la podía servir.

A la semana recibí un sms "hola perrito, si puedes conéctate, tengo que hablar contigo". Recuerdo perfectamente, era una noche de esas que estás tumbado, aburrido en el sofá sin ver nada interesante en la tele. Pegué un brinco y fui al ordenador. Allí estaba Ella, abrí la conversación y me puse a sus pies, como siempre.

Ella se alegró de verme y me comentó que para dentro de dos días iba a precisar de mi servicio, que si podía ayudarla. Le dije que si estaba en mis manos, estaría encantado.

Era ya casi verano y hacía mucho calor y me dijo que tenía una comida con unas amigas en el centro de la ciudad y tenía un problema. Con l calor tan sofocante que hacía por esas fechas, tenía que hacer transbordo de autobús, que van llenos a esas horas y luego andar bastante rato y había pensado que en vez de coger un taxi, si podía contar con el perrito-chófer (como me bautizó en ese momento). La idea que tenía Ella es que fuera a recogerla al portal de su casa, que le hiciese una perdida y Ella bajaba, la llevaba en el coche con el Aire Aconcionado y la dejase en la puerta del restaurante. Sólo era ese cometido.

Yo le contesté con un inmediato..."Por supuesto Señora". Ella me dio las indicaciones y a la hora que debía pasar a recogerla.

Mientras me hacía mis cábalas, ya que estaba en la otra punta de la ciudad. Me tenía que dar tiempo de salir de trabajar, ir a recogerla y volver a trabajar, y si en medio me daba tiempo a comer...pues perfecto.

Pasé esos días con una gran excitación y nerviosismo, pero como todo llega. Llegó el día, era jueves, lo recuerdo.

Durante toda la jornada de trabajo, estuve mirando el reloj, deseando que fuese la hora de salir de trabajar. Tenía nervios, la boca seca, pero estaba muy ilusionado. Llegó la hora, fui corriendo al garaje a buscar el coche, puse el Aire Acondicionado a tope, hacía un calor en la calle..... En cada semáforo miraba el reloj, no podía llegar tarde, pero la ciudad al mediodía está imposible. Llegué al destino, miré el reloj y faltaban 5 minutos, así que me quedé en doble fila esperando, intentado no molestar mucho. A la hora exacta le hice una perdida, como me había indicado.

Al momento bajó, abrió la puerta del portal y como siempre, me quede mirándola, recuerdo que iba con unas sandalias...dejando ver sus preciosos piececitos... salí del coche, y le abrí la puerta servicialmente, cerré tras Ella y me monté en el coche.


Le pregunté, "adónde debo llevarla Señora". Me dio la dirección, era en todo el centro. Intenté organizar el viaje de la manera más rápida, la verdad que mi corazón palpitaba, su perfume me llegaba nítidamente y mi vista se escapaba hacía esos pies que se dejaban ver en las sandalías y que se movían juguetonamente. Ella se puso a hablar por teléfono diciendo que lelgaba enseguida.

Fue el viaje más bonito que he hecho en coche, lo puedo asegurar. Al llegar al restaurante....me acarició la mejilla y me dio las gracias por servirla. A lo que yo respondí... "ha sido un placer Señora, estoy para servirla" y vi como se alejaba hacia el restaurante, mientras un claxón del coche de atrás, me hizo despertarme....

Volví más contento que unas castañuelas, aparqué el coche y recordé ese momento con una gran ilusión....

La moraleja que quiero hacer con este post, es que el sexo no es algo obligatorio en una sesión de D/S

A sus pies Señora

su perrita luismi

El sexo en una relación D/S

A sus pies Señora:

La verdad es que muchos perros pajilleros confunden una relación D/s con tener una relación sexual sintiéndose dominados o con una fantasía. Pero en una relación no tiene porqué haber una relación sexual o una penetración. Puede un perrito sentirse muy humillado, simplemente siendo usado sin ninguna connotación sexual.

También hay que reconocer, que a veces es más animado, divertido o alegre el poder tener algún tipo de contacto. Por ejemplo hacer un cunnilinguis a la Señora es algo ...FANTÁSTICO. Pero puede haber relaciones D/s sin ninguna acción sexual.


Muchas veces, el perrito desea follar simplemente y eso es un gran error. Lo que el perrito debe desear, es servir a la Ama, si luego la Señora decide usarlo para su placer o facilitarle alguna connotación sexual, debe de agradecérselo a la Señora, pero no tiene que ser el objetivo final.

Hemos de reconocer, que una Señora decida usar a su perrito como su consolador... es algo fantástico. Imaginar que la Señora te coloca un preservativo y usa tu pene como un consolador para darse Ella placer...vamos...es algo que para que el placer sea el más grande que jamás se pueda contar. Pero esto no es óbice, a que un perrito disfrute también por ejemplo con otras circunstancias. Por ejemplo, sirviéndole de chófer para llevarle un día de compras, o irle a hacer un recado al banco o llevarle unos papeles...lo importante en todas las circunstancias es poderle ser de utilidad a la Señora.



Por todo ello, es muy importante saber que el objtivo final debe ser servir y satisfacer a la Señora, pero cuando el sexo se convierte en el único objetivo, al final se pierde la esencia de la D/s.

Supongo que como en todo....hay opiniones para todo..... puedo conocer las suyas?

A sus pies Señora

su perrita luismi

miércoles, 13 de abril de 2011

Un fetiche...IMPRESIONANTE

A sus pies Señora:

He de reconocerlo Señora, no lo puedo negar, soy un gran fetichista de una de las prendas femeninas más hermosas del mundo. Me encanta recibir y usar las braguitas usadas de la Señora.

Ahora mismo estoy escribiendo este post, mientras porto puestas unas braguitas usadas de la Señora Marquesa y es algo, que me llena de alegría y de excitación.

Todo comienza mucho antes de recibirlas. Cuando la Señora me confirma que ha puesto el envío desde la estafeta de Correos. Ahí ya empieza mi excitación. Pensando como serán, como oleran, cuando llegará.... Todo el día pendiente de llegar a casa y abrir el buzón, aunque los primeros días sabes que no van a estar, abres el buzón con una sonrisa, con una ilusión...pero está vacío...

Al cabo de los días, abres el buzón, tu corazón palpita, se acelera al ver un sobre acolchado marrón....SON LAS BRAGUITAS!!!! Subes a casa corriendo, no quieres perder tiempo....mientras vas mirando el sobres, ves tu nombre escrito de puño y letra de la Señora...eso ya te gusta, sonríes y la excitación sube por momentos....

Te sientas en la cama, respiras profundamente, rasgas el sobre con cuidado y ummmmmmmm ves una braguita grisáceas....ESPECTACULAR, te imaginas esa braguita puesta en la Señora, llevándola un día entero, pero lo primero que haces es olerla, ummmmmmmmm qué olor más maravilloso, por muchas braguitas usadas que hayas olido, la última es siempre la mejor, la que mejor aroma tiene, no te la quieres quitar de la nariz, sientes el tacto suave de la braguita, buscas la parte que está en contacto con las partes más íntimas, son las que más aroma tienen, ufffff aspiras una y otra vez, estarías horas ahí con la nariz....sacas la lengua un poquito y aunque sabes que no hay nada, saboreas la braguita....

A estas alturas, ya hay una aprte del cuerpo que ha crecido y quiere salir del pantalón.... te bajas el pantalón y dejas en libertad al "monstruo" que ha crecido.... y restriegas la braguita sobre el pene, para calmar la excitación, pero se produce el efecto contrario. Así que decides usar la braguita, pero ahora mismo es imposible, ya que "el monstruo" no es retenido por braguita y asoma la punta por todos los laterales. Pero no puedes remediarlo y haces una fotito para mandarla a la Señora....

De verdad, creo que son los mejores momentos. Luego la llevas a trabajar y tener esa sensación en la oficina, de saber que quizás lleves la braguita más sexy de toda la oficina, aún te excita más. Tienes el pene en una constante excitación durante todas las horas de la jornada laboral. Cada vez que vas al baño.... "el monstruo" se abalanza, ya que está excitado todo el rato y lo bueno es que tu mente no deja de estar "activa" todo el día. Imaginándote a la Señora con ella puesta, esa braguita que ha estado rozando sus partes más íntimas, ahora están tocando tu piel, y se produce una situación mágica, una gran excitación.

La verdad es que hay mucha gente en páginas Web que venden braguitas usadas. A modo de prueba, antes de poder tener la suerte de tener unas braguitas de una Señora, yo también compré por internet...pero no tiene nada que ver, son sensaciones diferentes. He comprado en varias webs de chicas amateur. Algunas han sido una auténtica estafa, otras han cumplido, pero la verdad.... es que no me ha excitado nunca tanto como las que te envía una Señora....por que sabes que lo han hecho con toda dedicación, de verdad, no por una transacción económica y la verdad.... es que me excita mucho llevar una braguita usada para trabajar....

Acepto todas las braguitas usadas que me envíe Señora....

A sus pies Señora

su perrita luismi

martes, 12 de abril de 2011

El mejor bar del mundo....

A sus pies Señora:

Tengo que reconocer que no soy un adicto a los bares, ni un gran conocedor de ellos, ya que no bebo nada, pero he de reconocer que para mí, hay un bar que es el mejor del mundo....

No está céntrico, pero sí es una plaza muy transitada de la ciudad. Es una especie de taberna inglesa que se lleva mucho, con su suelo de madera, sus asientos de parejas con la mesa en medio pegada a la pared, al estilo de unos reservados, y tiene algunas mesas de estas en un pequeño altillo que da cierta intimidad....

Esto me pasó ya hace años, después de mucho tiempo esperando y suplicando a la Señora que me dejase verla aunque fuese a tomar un café, me citó un día a las 11,00 de la mañana en esta cafetería. Durante los días previos no podías parar de lo nervioso y excitado que estaba, busca mil y una vez el bar, ya que no lo conocía, pero me aseguré de la zona y un par de días antes me acerqué paseando y lo miré, no había duda, era el nombre y  las señas, no podía faltar a la gran cita.

Llegó el día, me vestí como me indicó la Señora con una braguita suya (otro día explicaré estos detalles), un pantalón cómodo y un polo de manga corto, muy normal. No quería llegar tarde, así que 20 minutos antes ya estaba aparcado y haciend tiempo, no quería llegar tarde, pero tampoco demasiado temprano. Los nervios me comían por dentro, así que decidí slir y dar una vuelta para intentar relajarme. El calor era sofocante, y cada vez que miraba el reloj, más nervioso me ponía, pero más empezaba a sudar....no quería dar una imagen lamentable, así que iba buscando la sombra por todos los lugares. 5 minutos antes me planté en la puerta, esperando a la Señora....se me hizo el tiempo más largo.... Al final la vi, al otro lado de la calle esperando para cruzar....

Estaba nervioso, no sabía como saludarla públicamente.... cuando llegó Ella, me acerqué y le dije en tono bajo "A sus pies Señora", Ella sonrío y me dio dos besos como a cualquier amigo.

La seguí detrás de Ella y pasamos al bar. Era la primera vez que entraba, que lo veía por dentro y el contraste del Aire Acondicionado me tranquilizó, iba a dejar de sudar y de ponerme nervioso por que la camisa me dalatase todos los nervios. Ella eligió la silla y yo me acerqué a la barra para pedir als consumiciones. Aún las recuerdo, un café con hielo para Ella y una Coca Cola para mí.

Nos sentamos y empezamos a hablar de cosas triviales, eso em tranquilizó, yo me moría de ganas por mirarla a los ojos, pero me daba miedo, Ella se percató y me dejó que la mirase un buen rato sin decirme nada. Estaba muy feliz, más tranquilo, relajado, se cumplía un sueño, poder estar en eprsona con la Señora. Al rato sentí como su pie desnudo buscaba mi pierna, y me dijo de una manera muy coqueta... "cone ste calor los pies sufren mucho, no serás un perrito bueno y me darás un masaje mientras charlamos"?

Como puede comprender....instintivamente miré a todos los lados,e stábamos muy solos y Ella me dijo, "tranquilo, no nos ve nadie" yo acaricié su pie, y ufffff ahora tenía unos escalofríos y una excitación tremenda. Ella me estaba hablando, pero si l soy sincero, mi mente no prestaba mucha atención, sólo pensaba en sentir la calidez de su pie. Lo masajeaba suavemente, cojía cada dedito, lo masajeaba, acariciaba el empeine, el talón...Ella cerraba los ojos y veía que le gustaba...

En ese momento me dijo en un tono suave y sensual...."creo que te estás muriendo por besarme el pie....puedes hacerlo". Esa frase me puso a cien. Me agaché como pude, disimuladamente y besé su dedito gordo, después me atreví a chuparlo enterito, y fue una de las mejores sensaciones de mi vida. Ese sabor, esa textura, esa calidez.....hacían que mi cuerpo estuviese a punto de explotar.

Después de varias lamidad a su dedito, Ella me dijo que parase que pusiera las manos sobe la mesa y la mirase fíjamente. Noté como su piececito buscaba mi entrepierna y empezó a jugar con ella. Me miraba lascivamente, me sacaba la lengua y su pie no dejaba de jugar..... hasta que después de un rato y notando como mi pene seguía creciendo, me dijo....." si quieres correrte, hazlo ahora"....

Cómo puede comprobar....terminé de una forma fabulosa.

Se levantó y me dijo que le había gustado mucho, que volveríamos a ese bar. Yo le dije que por mí encantado. Cuando salía detrás de Ella, en la calle se giró, me dio dos besos de despedida y me dijo "espero que tengas el coche cerca, por que la braguita no ha sujetado todo tu ímpetu", se río suavemente y se me alejó.

Yo fui rápido a buscar el coche, llevaba una mancha en el pantalón evidente y el polo, por más que lo estiraba no lograba taparme la mancha, pero jamás podré olvidar ese bar..... Es más cada vez que paso por delante.... ufffff qué grandes recuerdos.

A sus pies Señora
su perrita luismi

lunes, 11 de abril de 2011

Adorar unos piececitos....un placer

A sus pies Señora:


Este post lo quiero dedicar a una de las situaciones más fascinantes, hermosas y maravillosas de la D/s. Me refiero a la adoración de los peis de la Señora.  Lo que comúnmente se puede llamar como fetichismo de los pies.

 A mi particularmente es una de las situaciones que más me gusta. No se puede explicar las sensaciones que se tiene al tener entre las manos unos piececitos suaves, el sentir la sensación de descalzar los pies, de sentir como los pies son acercados al cuerpo, como la boca se deshace en agua para sentir esa piel suave, no
tar como se acercan a los labio y ver como la lengua recorre cada centímetro de la piel de esos pies tan dulces.


Es maravilloso cuando llga el verano, las mujeres se ponen sandalias y uno puede ir sentado en el autobús, mirando una gran cantidad de piececitos y la mente echa a volar, a imaginarse que uno se arrodilla y tener el placer de sentir esos peicecitos sobre mi cuerpo...

La verdad es que me encanta todo lo relacionado a los piececitos femeninos. Tenerlos sobre mi pecho, que jueguen por mi cuerpo, pero lo que más me gusta es poderlos besar, lamer, acariciarlos....

Es una sensación que no se puede describir.... el poder saborear lentamente cada dedito, el notar como se lengua no deja de moverse recorriendo cada centímetro de los piececitos, ufffff

Sentir como el pie desnudo recorre mi pecho, jugando con mis pezones....me produce tal sensación de excitación y de placer, que todo mi vello se me eriza, la cabeza empieza a imaginar, la boca se me seca de excitación.... Aunque el éxtasis se produce cuando el dedito gordo del pie se posa sobre mis labios, y va introduciéndose lentamente en mi boquita, la lengua lo recibe lamiendo cada centímetro de la piel y una parte de mi cuerpo...va adquiriendo un tamaño que demuestra el nivel de excitación que se acumula en mi interior.



Ni que decir tiene, que cuando un piececito juega sobre esas partes prohibidas, la excitación es tal, que con un poco de movimiento sobre mi pene con el piececito, es capaz la Señora de ordeñarme hasta la última gota de mi leche... Y desde luego, no hay nada más hermoso que lamer un piececito con la leche que me ha sacado la Señora....

Es algo maravilloso.
Aquí va un regalo....
LOS PIES DE LA SEÑORA MARQUESA




"Me gusta sentir como tu cuerpo tiembla incontrolable cuando sabes que mis pasos se acercan a ti"

su perrita luismi

jueves, 7 de abril de 2011

Mi primera vez...de verdad!!! (II)

Continuación del post anterior...

A sus pies Señora:

Si han leído el anterior blog, comprenderán que mi excitación estaba en los albores, con la Señora tumbadita en la cama, ordenándome que continuase con mi sesión de masaje, así que me subí a la cama y con mucha suavidad, con la yema de mis dedos iba dibujando pequeñas "eses" desde la nuca hasta el final de la espalda, subiendo y bajando, alternando con besos suaves y dulces por la espalda, rozando con mis manos cada vez más el final de la espaldita, buscando los muslos y las piernas, mientras mis labios cada vez más iban ganando protagonismo, dando más besos suaves, recorriendo con mi lengua sus piernas, su espaldita, se notaba que se estremecía...le estaba gustando y eso me daba fuerzas para seguir, intentado relajarla con las caricias suaves de mis manos....acariciando, rozando con la yema de mis dedos....

Se levantó la Señora y me ordenó ponerme de pie, con la cabeza abajo y las manos atrás....sacó una bolsa pero no pude ver su contenido ya que se puso detrás de mi..... Y con un movimiento rápido me colocó unas esposas.... un sudor frío me recorrió, excitación y nerviosismo a la vez, pero alguna aprte de mi cuerpo me delataba que todo eso en el fondo me encantaba.

Así, esposado sentí como la señora se ponía delante de mi, llevaba un artilugio en las manos que no descifraba, y mientras acariciaba mi pene erecto a la vez que me decía..." me gusta que estés así, pero ahora esto tiene que recogerse"... Me puso un paracaidas, una pieza que sujeta el pene y los huevos y lleva unas pesas que tiran de los huevos y evita que el pene crezca.... Sentí al principio un cosquilleo, ya que las molestias se pasaban por sentir el tacto de las manos sobre mis partes....

Pero a la vez que jugaba con las pesas, movía y mi pene ya se retorcía, la excitación bajaba y el dolor se adueñanaba de mi....pero por dentro estaba excitado, era lo que quería, la Señora estaba contenta y me susurraba al oído que le encantaba ver mi sumisión. La tenía delante, con un sugerente sujetador, sus pechos turgentes cerca de mi cara, en ellos me fijaba para contener las molestias de las pesas....las piernas me temblaban, pero la visión y las palabras de la Señora...me daban fuerzas....

Al rato me quito el artilugio, se tumbó en la cama y esposado me hizo darle besos por el cuello, la espaldita. Era una situación incómoda, pero de verdad....mi pene no dejaba de crecer.

Después de un buen rato, me quitó las esposas.... me  ordenó tumbarme boca arriba en la camita... ella se puso a horcajadas sobre mi carita, pero sin dejarme saborear su coñito, poniéndomelo lejos de mi boquita. Ella me dijo, tienes que intentar lamerme el coñito, yo estiraba el cuello, sacaba la lengua, pero apenas podía lamerla... era una sensación de querer y no poder, mientras sus uñas se clavaba sobre mi pecho, me arañaba, pero era una excitación que hacía crecer aún más mi pene, Ella sonreía y empezaba a acariciarlo con mi mano, bajando la cabeza y jugando con su cabello con mi pene. Ahí estaba yo, por un lado disfrutando con sus caricias y por otro lado sufriendo, deseando lamer su coñito, pero sin poderlo hacer.....

Sus manos se centraron en mi pene, cada vez iba aumentando la frecuencia, subía y bajaba y mi cuerpo se estremecía y justo en el momento que iba a eyacular, se sentó sobre mi carita, dejándome su coñito empapado sobre mi cara y mi pene explotando y llenando todo con mi leche..... Así nos quedamos un buen ratito, descansando, sintiendo uno de los mayores placeres de mi vida....

Al rato se levantó, y me hizo acompañarla de rodillas, fuimos al baño, me hizo tumbarme en la ducha y me dijo que me había ganado un premio.... levantó la pierna y me tuve el enorme placer y orgullo de ser regado con su néctar dorado... llenó todo mi cuerpo, sentí el cálido néctar por todo mi pecho..... Yo pensé que me moría de tanta excitación.

Me ordenó ducharme....Ella salió del baño y cuando salí ya duchado, ya no estaba en la habitación......

Todavía lo recuerdo...fue ESPECTACULAR.....

A sus pies Señora.
su perrita luismi

lunes, 4 de abril de 2011

Mi primera vez....de verdad!

A sus pies Señora:

Aún recuerdo como si fuese ayer mi primera sesión real de D/s. Fue hace año y medio, pero fue un momento especial y mágico para un servidor. Llevábamos ya varias veces hablando sobre la posibilidad, varias veces nos habíamos tomado un café, charlado, pero me faltaba el paso de poderla servir de verdad, de estar un ratito bajo sus órdenes.

Fue un 21 de septiembre, había reservado una habitación en un hotel del centro de la ciudad. Quedamos en la puerta, muchos nervios se me acumulaban en mi interior. Como suele pasar en estos casos que llevas prisa, nos tocó una recepcionista de prácticas y lo que tardaron en registrarnos y darnos la habitación. Se me hizo eterno ese rato.

Después subimos a la habitación, siempre detrás de la Señora. Abrí la habitación y nada más entrar me arrodillé ante Ella y me ordenó que me desnudara. Los nervíos recorrían mi interior, nunca tuve tanta torpeza para quitarme la ropa...

Ella se sentó en la cama y me dijo que estaba cansada de todo el día, que llevaba los pies molidos...una clara indicación que recogí enseguida. Le quité los zapatos y me dediqué con locura a darle un agradable masaje, primero con mis manos, pero más tarde con mi boquita y mi lengua, dedicándome a cada dedito con especial atención, chupando con suavidad, intentando relajar. En esos silencios que se producen uno piensa si lo estará haciendo bien.... pero no me atrevía a mirar a la cara para ver si le gustaba. Con un poco de miedo y excitación, levanté la cara y vi que por los ojitos de la Señora estaba disfrutando, pero Ella se dio cuenta y con el otro pie me bajo la cara y luego emepzó a juguetear con una parte de mi cuerpo que había crecido considerablemente.

En ese mismo momento, era tal la excitación, que estuve a punto de correrme, algo que no le hubiese gustado. Así que tuve que intentar concentrarme, pero era tanta la emoción y excitación, de tanto tiempo esperando ese momento.... que me costó conseguirlo, pero lo hice.

Después de trabajar muy bien sus piececitos, la Señora me dij que me iba a premiar con ver su cuerpo y empezó a desvestirse. La verdad que con estos estímulos mi excitación no se calmaba, sino que iba "in cresendo". Después me bautizó como una muy buena perrita masajeadora, por lo que me tuve que dedicar a sus piernas y a su espaldita. Fue un gran placer poder palpar y sentir cada centímetro de su piel, sentir con mis labios la ternura y suavidad de esa piel tantas veces deseada y anhelada.

Todavía recuerdo ese día, pero no creo que esa conveniente explicar todo en un sólo post.... sólo decir que conforme pasaba el rato, los nervios desaparecían. La tranquilidad se apoderaba de mi, pero sobre todo.... la felicidad de estar siendo un gran perrito que por fin lo podía demostrar con los hechos....

Continuará...

su perrita luismi